Cada día leemos noticias en los periódicos, las escuchamos en la radio y seguimos los informativos por televisión. Recibimos un montón de informaciones que nos abruman, que son difíciles de digerir si no se dejan reposar.Todo se convierte en una maraña de datos. A ello hay que sumar la irrupción de la Web 2.0 y las Redes Sociales donde se nos permite la posibilidad de participar y conectar con cualquier punto del planeta.
La sociedad, y con ello la información y el conocimiento que de ella fluye a gran velocidad, ha sufrido cambios sociales y económicos profundos. Ya no somos sólo consumidores de información somos productores (prosumers) y además lo podemos hacer de forma gratuita. Recibimos, emitimos y viceversa: hay un diálogo que además se comparte con otros informadores y consumidores.
Y yo me pregunto ¿seremos capaces de movernos por este inmenso océano?
Pues claro que si, sólo tenemos que elegir y de hecho ya lo hacemos. Elegimos dónde y con quién queremos estar, con qué comunidades nos queremos identificar, a quién seguir, qué leer y con qué fin. La mayoría de las personas ya tiene su cuenta en Facebook (1.600 millones de internautas), Twitter… Otros han dado un paso más y siguen algún blog … nadie se salva ya de subir o seguir y ver vídeos en Youtube o Vimeo escuchar sus canciones preferidas en iVoox .
Aquellos que ya participan de todo lo anterior puede que necesiten herramientas para gestionar toda esa información, eso a nivel usuario, pero si ya se es miembro activo de la comunidad estará en LinkedIn o si necesita trabajar con toda la información utilizará Hootsuite para publicar y hacer el seguimiento de lo que hacen otros en su mismo sector o Google Alerts, por ejempl,o para mantenerse informado.
Además, ya no es necesario que nos conectemos desde el PC. Tablets y móviles nos permiten acceder a la información desde cualquier lugar. Por otro lado existen muchas aplicaciones que nos hacen más fácil la tarea. Quizás nunca pensamos que tendríamos a nuestro alcance herramientas que nos ayuden en las consultas de salud (Artículo de El Mundo) o saber desde el móvil cuanto tarda en llegar nuestro autobús.
Entre todos hemos cambiado la forma de comunicarnos a la vez que buscamos un mundo más fácil y accesible. Desde las administraciones debemos aprovechar estos cambios y apuntarnos al carro para entender y atender al ciudadano, para entendernos a nosotros mismos.
Muy bien, Pilar, ¿dónde dices que hay que firmar..?
Estoy de acuerdo, punto por punto, con tu exposición de ideas. Este carro de avances hay que tomarlo y cuanto antes.
Felicidades, me parece un texto muy claro y, personalmente, te pongo un 10…
Muchos besos y a ver si nos quedamos (me incluyo yo, la primera) en las buenas intenciones porque el camino no va a ser de pétalos de rosa.